Cómo responder a las críticas

HACER FRENTE A LAS CRÍTICAS

A nadie le gusta que le critiquen. Una persona asertiva se dará cuenta de que las críticas se pueden clasificar en dos categorías:

. Injustas: si la crítica es injusta, no tiene importancia y no debes prestarle atención.

. Justas y constructivas: si la crítica está justificada, aunque siga sin gustarte, a la larga puede resultar útil y positiva.

Reaccionar agresivamente a las críticas tiene sus inconvenientes. Si respondes con brusquedad a la crítica, probablemente iniciará una discusión. Si no es asertivo, no ganarás en la discusión y acabarás sintiéndote mal.

Si reaccionas pasivamente y está siempre de acuerdo con las críticas, tanto si son justas como si no, lo que conseguirás será deteriorar la opinión que la otra persona tiene de tí y que baje tu propia autoestima. Al final acabarás no haciendo nada por miedo a atraer las críticas de los demás.

 

Hay tres técnicas principales para afrontar las críticas:

1. Si la crítica es justa: acepta todo lo que se pueda justificar ¿QUE MAS DÁ? (aunque no lo que simplemente sean juicios personales) y dí lo que piensas hacer al respecto:

«Te tocaba a ti lavar los platos esta mañana y todavía están en el fregadero (crítica) eres un caso perdido [juicio personal].»

«Sí, me tocaba a mí. Los voy a lavar ahora.»

Esta no es la respuesta de una persona pasiva, porque la crítica era justa. Tú prometiste lavar los platos y no lo hiciste. Su respuesta servirá para demostrar que reconoces la falta y que intentas arreglar las cosas. Esto hará que se aplaquen los ánimos y evitarás una discusión.

2. Si la crítica tiene una parte de verdad, pero es exagerada: acepta lo que está justificado, pero no reacciones a la exageración:

«Tenías que haberme entregado el informe a las 9 de la mañana y todavía no lo has terminado. Todos los demás hacen su trabajo a tiempo.» (Es probable que la única parte cierta de toda esta crítica sea la primera frase.)

«Sí, es cierto que me he retrasado con el informe y lo siento. Trabajaré durante mi tiempo de descanso y te lo entregaré lo antes posible.»

Al guardar la calma y responder a la única parte cierta de la crítica, mantienes el control de la situación. Aplacarás la crítica al ofrecerte a poner remedio a la situación y, dado que no has respondido agresivamente a la parte injusta, no es tan probable que se inicie una discusión.

3. Responder con una pregunta: ésta es una respuesta especialmente útil cuando alguien te está criticando como persona en vez de criticar tu trabajo.

«No lo entenderías.»

«¿Por qué crees que no lo entendería?»

El modo en que la persona que hace la crítica responda a tu pregunta le ayudará a decidir si realmente está preocupada por tí, en cuyo caso le explicaría el porqué de su comentario, o si simplemente está siendo desagradable; de ser así, es probable que empiece a despotricar, sin decir nada concreto que respalde su comentario. Entonces te darás cuenta de que realmente no vale la pena preocuparse y sus críticas ya no te afectarán.

LA PREPARACIÓN

 

Supongamos que necesitas encontrar una forma positiva de persuadir a alguien para que haga algo. A muchas personas les resulta difícil, especialmente si hay una crítica real o implícita del trabajo de esa otra persona. Hay cuatro aspectos que debes tener presente, y seguramente te serán de gran ayuda preparar un esquema con antelación para asegurarte de que das cada paso a su debido tiempo. Como es natural, no es necesario que leas el esquema cuando hables con esa persona, pero te ayudará a recordar lo que quieres decir. Los cuatro pasos son:

1. Explica la situación actual tal como tú la percibes. Sé breve y cíñéte al tema principal sin permitirte opiniones que no vienen al caso.

2. Demuestra que entiendes los sentimientos de la otra persona y luego expresa los tuyos. Puedes decir:

«Me siento mal por esto» o «Me doy cuenta de que te encuentras ante una situación difícil».

3. Dí lo que quieres, establece las mínimas exigencias posibles y sé realista. No tiene sentido exigir cosas que son físicamente imposibles para la otra persona. En tales casos (a menos que sea totalmente inapropiado), tienes que estar preparado para negociar o comprometerte.

4. Explica cuál crees que será el resultado, nombrando las recompensas si cumple, o las penalizaciones si no lo hace, («Quizás haré mi pedido en otra parte.»)

 

Si puede analizar su propia conducta y utilizar las pautas que se dan en esta sección para llegar a ser una persona más asertiva, habrás dado un gran paso hacia delante en el camino para hacer frente satisfactoriamente a las personas difíciles que te encuentres en tu vida.

 

 

 

 

La Inteligencia Emocional, Daniel Goleman, Edit. Javier Vergara.

@CarmenRogher